Hoy queremos hablar de una de las cuestiones más demandadas en el estudio: cómo decorar para que tu casa transmita calma. 

Es la sensación más buscada por los clientes al llegar a casa. La rutina acelerada en la que vivimos, los nervios y preocupaciones que se mantienen en el tiempo, hacen que nuestro nivel de estrés se mantenga alto. Y aunque muchas veces no seamos conscientes, la decoración de nuestro hogar puede empeorar esa situación o, por el contrario, ayudarnos a que esas sensaciones se queden de puertas hacia fuera. Cuando llegamos al hogar buscamos desconectar del mundo y conectar con nosotros mismos. Necesitamos encontrar un espacio de paz donde poder mirar hacia dentro.

Por eso os hemos preparado unos tips fundamentales sobre cómo decorar para que tu casa transmita calma. Tres herramientas infalibles que transformarán tu espacio en el lugar al que siempre querrás volver.

COLORES NEUTROS

Es muy importante la paleta de colores a la hora de la gestión emocional. Son muchos los estudios que nos hablan de la influencia cromática en las emociones de las personas. Existen colores que invitan a la quietud y la reflexión; del mismo modo que otros lo hacen a la acción, al dinamismo y el movimiento. Por eso es vital ser conscientes de lo que queremos obtener para elegir bien.

En nuestro caso, si lo que queremos es que nuestra casa transmita calma, deberemos apostar por una paleta de colores que incluya el blanco, beig, topo…. Sobre todo en paredes, suelos y mobiliario de gran tamaño como sofás, mesas o aparadores.

MATERIALES NATURALES

No solo deben parecerlo, sino serlo. Si una papelera es de plástico imitando a ratán, sigue siendo plástico aunque no lo parezca y por tanto permanecen las sensaciones negativas que relacionamos con ese material. Sin embargo, si incluimos elementos naturales en casa, esta se impregna de toda esa energía que de alguna manera está viva. La madera, el ratán, el esparto, el algodón, el lino… son ejemplo de materiales con los que siempre acertaremos. Todo lo que puedan transmitirnos será agradable y nos acercará más a esa harmonía que buscamos.

En este punto también es importante hacer referencia a las plantas. Cuantos más elementos vivos incluyamos en casa, más y mejor conectaremos con sensaciones apacibles. Las plantas de hoja verde son muy recomendables y existen muchas variedades de cuidado fácil para los que no disponen de mucho tiempo. Recuerda siempre buscar el equilibrio visual. No es necesario que de repente tengamos una selva amazónica en casa. Todo ha de ser muy sutil. Porque en lo sutil encuentras la calma.

NO SOBRECARGUES

Y el último tip sobre cómo decorar tu casa para que transmita calma sigue al hilo de lo que os acabamos de comentar. Hay que encontrar el equilibrio con sutileza, sin sobrecargar el espacio.

A veces tenemos tendencia a acumular cosas por la falta de consciencia con la que consumimos. Esto a la hora de decorar nos genera ruido visual y nos aleja de nuestro plan. Todo lo que quede a la vista en estanterías, aparadores, mesas… debe ser sencillo y equilibrado, colocado con un sentido y un orden para generar paz mental.

Sentarte en el sofá, mirar a tu alrededor y sentir que, aunque ahí afuera a veces nos esperen grandes batallas, estás en el lugar adecuado. Y no hay nada que genere más calma que eso.

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